Entrevista

“Es fácil encarcelar un pibito, la cuestión es quién le pone el sonajero al funcionario corrupto”

La abogada Florencia Arietto habló largo y tendido con SaltoCiudad.
La abogada Florencia Arietto habló largo y tendido con SaltoCiudad.

SALTO, Septiembre 27 (Por Valeria Vizzón, de la redacción de www.SaltoCiudad.com) Sus palabras parecen latigazos. Latigazos de sinceridad, convicción y conocimiento del tema que habla. No se calla; tampoco duda. Florencia Arietto afirma que siempre estuvo convencida de ser abogada y cita las palabras del diputado socialista Alfredo Palacios: “abogar es defender a los débiles”. Y agrega: “En Salto más de uno me conocerá por haber defendido a los más desprotegidos”. Arietto estuvo el fin de semana en nuestra ciudad, y entre pañales y atenciones a su beba de 2 meses que se llama Paz, dialogó con SaltoCiudad. Pobreza, Ley penal juvenil, baja de imputabilidad, el caso Carrera, y la seguridad en Salto fueron algunos de los temas abordados en una charla que se extendió por casi una hora.

Hace mucho que dejó de vivir en Salto. Sin embargo ¿Sigue vinculada a la realidad de la ciudad? ¿Viene seguido?

Siempre vuelvo, mi hija nació en Capital Federal y mi marido es de allá pero nunca perdí la vinculación con mi pueblo porque tengo mi familia acá. Es mi identidad, en Salto me siento en casa.

¿Por qué eligió ser abogada penalista?

 Fui ayudante de la Cátedra Penal en la Facultad. Lo elegí con la idea de tratar que la justicia no sea tan desigual. El derecho penal es el más duro y el más irreversible de todos porque te puede quitar la libertad. El poder judicial es un poder político y en general se descarga sobre los más débiles. Tengo la convicción que hay que luchar contra la desigualdad. Pero hay defensas que no ejercería, defiendo la constitución, todos tienen derecho a ser defendidos, pero uno puede elegir.

¿Cómo surgió la Fundación Arde la ciudad?

Empezamos en 2006, en la sala de ensayo de la banda La Mancha de Rolando en Sarandí. Las letras de este grupo son bastantes realistas, tratan del costado desigual. Le dimos el nombre de Arde la ciudad, una canción de La Mancha de Rolando. Empezamos a trabajar con pibes detenidos, para ayudarlos cuando salen para evitar que vuelvan a cometer otro delito. También trabajamos con sus hermanitos que van en el mismo camino que su hermanos adolescentes, hijos de los 90, los que se conocen como pibes chorros, que en general ofician de padres de los más chiquitos porque sus padres lo tienen muerto o preso. En ese contexto trabajamos, gestionamos el trámite de DNI, búsqueda del trabajo, una defensa técnica, supervisión de los casos, en los lugares de detenciones para que tengan una educación y una salud efectiva.

Me gustaría conocer su opinión sobre el caso de Fernando Carrera

Es la típica causa armada. El fallo último donde le bajan la condena de 30 a 15 años es una forma de proteger al sistema judicial. Una causa que ha pasado por tantos estamentos judiciales y han ratificado aún sin rever que no había prueba. Si le dan la razón a la defensa, que la tiene, ponen en crisis medio poder judicial de la Nación. Entonces los jueces y los fiscales terminan trabajando corporativamente. Y su pensamiento es: sacrificamos a un inocente en post de preservarnos. La causa Carrera es eso. Es posible que Carrera vuelva a prisión, porque la Corte sacó un fallo salomónico, ellos podrían haber dicho que era nulo. No querían pagar el costo. En caso que se ratifique todo esto, llegará a la Corte Interamericana de Derechos Humanos y una vez más van a condenar a la Argentina por el daño realizado a un inocente. O sea seguimos teniendo en términos de justicia en la región y continente, una imagen bastante perversa: por un lado, somos los paladines de los derechos humanos, y en el patio trasero, a los pobres y a los débiles se lo priva de su libertad sin pruebas. Es el costo que se paga por mantener el sistema.

¿Qué opinión tiene sobre la Suprema Corte de Justicia?

Está bien. Es una Corte bastante razonable, que responde a intereses. Nadie es inmaculado, todos tenemos nuestra ideología, nuestro bagaje histórico, de dónde venimos, dónde nos formamos, quiénes fueron nuestros padres. Suponer que la Corte Suprema es un ente abstracto impoluto es mentira. Responden a sus intereses, y fallan de acuerdo a sus intereses y tratando de no violentar la constitución pero también dilatando cosas como la Ley de Medios que es una falta de respeto a la ciudadanía. Tienen que decidir por sí o por no pero tienen que fallar.

¿Por qué cree que al hablar de inseguridad se omite el tema de la pobreza, la violencia y la marginalidad?

No se habla de pobreza porque es políticamente incorrecto. Donde hay pobreza hay desigualdad, y esa desigualdad es la semilla de la violencia. Donde existe desigualdad, donde la gente se pelea  por nada, donde se administra miseria: hay violencia. Esa violencia detona primero en los núcleos de la misma villa, la primeras violencia, la  básica está en la misma villa pero lo que pasa es que a nadie le importa. Porque no se ve. La que se ve es cuando esa persona sale a ejercer violencia en la clase media. Cuando esa persona salió de la villa a ejercer violencia a otro sector social, ya adentro de la villa está saturado el nivel de violencia: abuso sexual, robo, asesinato, ajuste de cuentas, esquinas por las que no se puede pasar, gente que no come, gente que se pelea por un pedazo de chapa. Violencia básica para sobrevivir. Eso no importa, importa cuando sale ejercer violencia en otro sector social. A donde falta todo, es muy difícil pensar que la gente vaya a decir tengo hambre, pero voy a charlar con vos.

¿Qué papel juegan el oficialismo y la oposición al no debatir en serio sobre este tema?

Me parece que son hipócritas los políticos, hay mucho de improvisación. Hay mucho de me siento a pegarle al gobierno porque no tiene plan. Pero cuando le preguntas dónde, cuándo, cómo y con qué: no saben que decir, porque no caminan los barrios, no conocen la realidad, porque la política pasa por los medios. Es muy berreta la discusión. Aunque el oficialismo tenga muchos errores y discutibles, ha marcado la agenda durante estos años. La oposición dice: “somos la minoría, no tenemos las posibilidades”. La oposición tiene la obligación  generar los concesos para obligar a que se debatan los temas. Hay prepotencia por porte del oficialismo por establecer temas, con poca oreja para escuchar lo que dice la sociedad. Existen temas que en el microclima político dan pero no en los intereses del hombre de a pie. El gobierno falla en la comunicación y en observar los detalles. Y hay una oposición que hace la plancha. Son oposición entonces no se embarran, no son con corruptos pero tampoco evitan que haya corrupción ni evitan que haya choque de trenes porque no controlan. Me parece que hay un déficit de debate serio sobre estos temas.

¿Qué rol cumplen los narcotraficantes en este tema? ¿Y cuál es el rol del Estado en las villas?

La villa es donde se almacena la droga, donde hay armas, y pibes privados de todo y el Estado no está. El Estado se presenta en términos policiales. Esa es la base de la pirámide. Pero en la cúpula de la pirámide están los narcos, que no viven en las villas y corrompen funcionarios. Eso es el delito organizado, una base vulnerable que se usa para el trabajo sucio, y los más ricos que se proveen de los de abajo. Así funciona el crimen organizado, si no se atacan esas dos puntas es imposible bajar la tasa de criminalidad. Es fácil encarcelar un pibito, la cuestión es quien le pone el sonajero al funcionario corrupto, o al narco que corrompe al funcionario. Pero para atacar la corrupción hay que estar limpio. No se puede perseguir a la corrupción si se está sucio. Es difícil encontrar gente honesta no salpicada por la corrupción

Con el panorama que brinda, parece difícil encontrar una solución…

La tiene. Cuando la sociedad se dé cuenta a quién vota, en serio tenga la decisión de darle una chance a personas que tienen algo que proponer y que no vienen aparateadas. En los partidos políticos no hay renovación porque no te dan la opción. Me gustaría que en el peronismo haya internas, y yo me iría a internas enfrentando a la parte más rancia de ese PJ. Pero si yo, Florencia Arietto, me presento a diputada dentro del PJ me sacan carpiendo. Porque están los “gordos” de siempre sentados en los sillones, y en la Argentina como en otros países se llega a los lugares de decisión a través de los partidos políticos. Y de la corporación política no se habla. Y hay tanta presión que el que viene como renovación no lo es. Por ejemplo: Massa. Lo que trae de arrastre no es renovación. La idea es que los militantes que no venimos apadrinados por nadie tengamos la posibilidad. Ni el peronismo ni el radicalismo ni los frentes que se abren tienen mucha democracia respecto a habilitar en serio  la disputa frente a frente con actores nuevos.

¿Se considera kirchnerista?

Me parece que es un proyecto con cosas muy buenas. Sin embargo, hay banderas que se están entregando en post del electoralismo que no lo valen. Apoyo pero no soy obsecuente. Me parece que lo peor que le pasa a la presidenta es rodearse de obsecuentes. Tampoco me gusta que no se pueda dar una discusión profunda porque en seguida algún kirchnerista te caratula de una cosa u otra. Yo la voté a Cristina y la volvería a votar. Porque me parece que del otro lado no hay mucho que aporte. Este gobierno dejó muchas cosas a mitad de camino: no profundizó en la reforma de la policía, no profundizó en la urbanización de villas, no profundizó en el rescate de los pibes y la lucha contra el narcotráfico. Y cuando se queda a la mitad de rollo es muy difícil no virar a la derecha si te va mal electoralmente. Hoy Granados en la provincia de Buenos Aires es Ruckauf. Es lo que hace 10 años nos espantaba que decía Ruckauf. Ahora que gente progresista que ha tildado de gorila a cualquiera diga que Granados le puede hacer bien a la provincia y que piense que Scioli es la interna de Massa en 2015, es difícil de entender. Si  la salida es por derecha menemista algo mal se está haciendo.

Volviendo a los jóvenes ¿hay estadísticas actualizadas sobre delitos cometidos por menores de 16 años?

No existen estadísticas actualizadas desde 2008. La Secretaria de Niñez de la Nación no las  actualiza, esa es otra de las falencias graves. Lo que se puede ver es a través del ingreso de expedientes de menores al sistema judicial, y eso refleja que el 4 por ciento de menores cometen delito, de la totalidad. De ese 4, menos del 1.5 es homicida. Es un porcentaje muy chico. En cambio si se va contra las bandas organizadas, los policías corruptos, y las barrabravas seguro que tendríamos menos inseguridad.

¿Cuál es su opinión sobre la baja de
imputabilidad?

La Ley penal juvenil es de la época de la dictadura y permite que los jueces hagan literalmente lo que quieran con los jóvenes de 16 a 18 años. Hay que actualizar la ley como está pidiendo la Corte Interamericana. Entre los 14 y 16 hay pibes que delinquen  y hay que darle posibilidad que se defiendan, que tengan pena proporcional a daño causado, que es mucho menor que el que se le aplica a los adultos. Es importante darle estatus jurídico a los pibes.

¿Está al tanto de la problemática de inseguridad en Salto?

Sí. Me parece que hay un problema grave en Salto, con una policía que depende de Pergamino, y una justicia que depende de Mercedes. Nada se resuelve acá. También existe un poder político que quizás no tiene el peso suficiente en la provincia y la Nación como para discutir en una mesa chica lo que se necesita. El poder político local tiene que presionar para que la jefatura departamental sea Salto porque de esa manera se tienen los recursos. Se podría hacer tranquilamente una policía comunal, sin armas, que esté presenten en las calles, en los lugares más conflictivos. Y lo más importante es trabajar en los barrios porque me parece que hay una complicación de nivel de violencia y de acceso a la droga.

¿Hay que vigilar más los accesos a las rutas provinciales?

Salto a diferencia de Arrecifes no está sobre una ruta nacional. Entonces el que viene a robar o a traer droga debe tomar una ruta provincial desde las rutas nacionales 8 o 7. Sería importante pelear la presencia de oficiales para hacer control en el ingreso a las rutas provinciales. Ahí se podría evitar el ingreso de gente de afuera que venga a robar. Cuando le balearon la casa a Salvatore dije: “el día que se aviven las bandas organizadas de afuera, Saltó será un bicoca”. Y es así, viene un auto hacen un golpe comando y se van.

¿Y el rol de la comisaría?

La Comisaría de Salto es muy chiquita, y a su vez es una ciudad donde hay mucha cantidad de dinero. Es necesario que el comisario sea de Salto, para conocer el legajo. Siempre hay comisario de afuera ¿Por qué Salto siempre con comisarios de afuera? ¿Por qué no le damos la chance a los policías buenos de acá? Igualmente por más que venga el mejor comisario del mundo es muy difícil si no hay recursos. Se arma un lio de inseguridad y cambian el comisario. Eso es de manual. Uno tiene que manejar recursos y tener una buena caja. Y sino una posibilidad es que todos paguemos una tasa y se arme una buena policía comunal. Y que Brasca vaya a discutir a la legislatura provincial, porque nosotros tenemos que tener legisladores allá. Se descentralice la justicia para que el intendente tenga el verdadero poder sobre la policía. Brasca aparte de nombrar 200 personas más en la Municipalidad, podría preguntar quiénes son los legisladores, y discutir en la legislatura provincial la descentralización de justicia y policía.

Por lo que dice hay tres puntos importantes: descentralización, más recursos para la comisaría y control de los accesos a las rutas provinciales…

Hay un déficit muy grande para cinco años de gestión. Yo apoyo a Brasca pero sino ajusta y deja de hacer la plancha se le va a complicar. En Salto es fácil robar, es fácil escapar pero la gente de Salto no está acostumbrada a que le roben y eso es lo peligroso: puede reaccionar de cualquier manera, quizás queriendo agarrar el chorro del cogote y termina muerto. Entonces hay que prevenir, hay que evitar sabiendo como es el modus operandi. Si sabemos que hay gente que viene de afuera, es importante gestionar y cortar el flujo. Pedir controles a los ingresos a las rutas provinciales. Para ver si con eso el Consejo Federal de Seguridad puede bajar un par de gendarmes para el control de ingreso. Es molesto para el sáltense, pero va evitar que venga un comando al mediodía y desvalije una casa. (www.SaltoCiudad.com)

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